
alerta por primera caída real en 14 meses
“Si bien la caída en moneda constante no es de gran magnitud, cobra relevancia por el contexto, poniendo el alerta sobre los niveles de actividad (principalmente en lo referido al IVA, por el nivel de consumo) y a las propias cajas provinciales, por estar entrando en un período donde sufren mayor stress por los compromisos de fin de año, a lo que se suma la cuestión electoral”, afirmó la consultora que dirige Alejandro Pegoraro.
Con foco en el detalle según tipo de envíos, el informe destaca que los de coparticipación alcanzaron los $284.229,8 millones (86,6% del total de las transferencias), con “una expansión interanual en términos reales de apenas el 0,2%”. “El dato relevante (en aspectos negativos) lo dio el IVA, que en moneda constante tuvo un descenso del 1% interanual; por su parte, el impuesto a las Ganancias se movió en terreno positivo (+ 4,3% real interanual), pero con una notable desaceleración respecto a meses previos”, sostiene.
En tanto, en materia de “otros tributos coparticipados” hubo un incremento real del 20,9%, al tiempo que lo relativo a “Impuestos Internos” mostró una merma en moneda constante del 7,4%, aunque ambos rubros representan valores absolutos menores sobre el total (5% ).
Asimismo, los ítems que componen las leyes y regímenes especiales -sostuvo el informe- “han tenido una muy pobre performance en este mes”. En esa línea, el Impuesto a los Bienes Personales volvió a tener caídas por cuarto mes consecutivo, con $ 22.535,6 millones y un descenso en moneda constante del 35,4% interanual; mientras que en lo referido al IVA de la Seguridad Social también hubo caídas reales (-1%), lo mismo que con los recursos del Régimen de Energía Eléctrica (-2,3%) y del Monotributo (-30,3%), todos en términos reales.
Com marco, la consultora resaltó que en 2018 y 2019 las transferencias automáticas sufrieron, en mayor medida, caídas reales “a partir de la baja de la recaudación y el alza inflacionaria”. Y noviembre de 2019 fue el último mes con “cierta recuperación de los envíos”. “A partir de ese momento, el último mes de 2019 y el inicio del 2020, con pandemia de por medio, las transferencias se movieron en terreno negativo”, dijo. Así, enero de 2020 marcó una caída real del 9,3% y febrero, del 4,1%.
La crisis del covid profundizó las mermas: -11,4% en marzo, -17,9% en abril y el piso de -25,6% de mayo de 2020, todos en términos reales. Aunque en junio de ese año se recortó la baja (-11,6%) y volvió a acelerarse en julio (-13,7%).
“Pero ese fue el fin de la caída: agosto 2020, con una suba del 2,2% real, dio inicio a un período de subas reales que ya lleva 14 meses, cuyo pico fue en abril de este año (+ 37,7%), influenciado por la baja base comparativa”, señaló Politikon Chaco.
Sin embargo, a partir de mayo las subas reales fueron desacelerándose, con un piso del 4,6% en agosto. Para la consultora, en el “proceso hubo dos factores que influenciaron en estos resultado”. “La base comparativa disparó los crecimientos en el bimestre marzo-abril, pero además hay cuestiones impositivas que alteraron la recaudación”.
Septiembre rompió esa tendencia y volvió a mostrar una aceleración. Y, “contra todo pronóstico, las transferencias dieron un vuelco importante en octubre, dejando atrás no solo la aceleración del mes previo sino también la racha de 14 meses de crecimientos que mantenía”.
Fuente